En las tiendas de los centros comerciales no se puede pedir rebaja. Ellos tienen un sistema para organizar los descuentos con base en las ventas de temporada.
Es decir, los artículos propios del invierno estarán en descuento al inicio de la primavera. A diferencia de los mercados de pulgas donde los clientes pueden negociar el precio de un producto directamente con el vendedor. La organización de estos mercados es más informal que la de los grandes establecimientos.