Si necesito reunirme con un gerente, es natural que su secretaria funcione como un primer filtro.
Si mi secretaria no logra pactar la reunión con la secretaria del hombre que necesito ver, entonces yo hablo con ella y trato de convencerla. A veces es más fácil arreglar las cosas entre un hombre y una mujer, no entre dos secretarias. Intervengo como último recurso.